Si el año pasado los ingredientes que sedujeron al consumidor fueron el retinol, el bakuchiol o el ácido hialurónico, este año, oiremos hablar, y mucho de la ectoína. Tal y como señalan medios especializados en cosmética, la ectoína destaca principalmente por sus aplicaciones en el sector de la cosmética. Como indica un artículo publicado por el medio anglosajón 'Cosmetics Business' #Ectoin ya ha logrado superar las 42 millones de visitas en TikTok y las búsquedas globales en Google se dispararon un 123% en el último trimestre de 2023. Este ingrediente protege a las células humanas de alérgenos, calor, sequedad y luz UV. Mejora la hidratación de la piel, evita la pérdida de agua por parte de las células de la epidermis, además de mejorar su barrera protectora, protegiéndola frente a factores externos, como la luz UV.
Pero, ¿qué es exactamente este ingrediente del que estamos escuchando a hablar los últimos meses? La ectoína es un aminoácido que se extrae de microorganismos y está llamado a ser tendencia y a añadirse en diversas fórmulas de Skincare. Este compuesto natural es producido por bacterias unicelulares que protegen a los microorganismos que viven en entornos con condiciones más hostiles y sus propiedades lo convierten en un interesante ingrediente cosmético. La ectoína es hidratante, calmante, antiinflamatorio y con propiedades regenerativas. Además, ayuda a fortalecer la función barrera de la piel y reduce la pérdida de agua de la epidermis y unifica el tono. La ectoína protege a los microorganismos de situaciones y climas extremos como desiertos, glaciares u otras condiciones climatológicas adversas.
El interés cosmético de la ectoína es porque es capaz de actuar como protector y estabilizador celular, y desempeña un papel de refuerzo de la hidratación celular y de protección frente a la irradiación UV. La lista de funciones que desempeña este microorganismo es muy larga y va desde reforzar la barrera cutánea hasta ayudar a reducir la pérdida de agua transepidérmica (TEWL), pasando por ofrecer propiedades superhidratantes o mitigar los efectos del fotoenvejecimiento. La ectoína también ha llamado la atención de las marcas de cosméticos y de la industria que buscan fórmulas compatibles con el microbioma. Gracias a su lista de atributos protectores, que se ha demostrado que se transfieren a su uso en cosméticos, parece ser el ingrediente activo definitivo y respetuoso con la piel.
Ese aminoácido ha demostrado tener propiedades excepcionales para proteger la barrera cutánea cuando se ve comprometida por el uso de tensioactivos agresivos, el frío o el calor extremos, el proceso de envejecimiento o la exposición a los rayos UV. Las investigaciones in vivo han demostrado que la ectoína tiene una gran capacidad de retención de agua y una mayor eficacia para mantener la hidratación de la piel que los humectantes a base de glicerol. Además, la ectoína demuestra una capacidad de hidratación a largo plazo.