La Unión Europea ha dado luz verde este miércoles a la Ley de la Restauración de la Naturaleza. Esta nueva normativa aprobada por el organismo europeo tiene como objetivo restablecer el ecosistema marina al menos un 20% hasta 2030 y recuperarlo por completo en 2050. Esta ley ha sido aprobada con el objetivo de paliar los efectos provocados por el cambio climático y las catástrofes naturales, cada vez más frecuentes.
Pero, ¿cómo afecta esta nueva ley a la industria y al sector cosmético?
Uno de los principales campos en los que repercutirá esta reciente directriz será en el abastecimiento de materias primas. Las compañías dedicadas al desarrollo de ingredientes y activos deberán cumplir con los requisitos en sostenibilidad sobre los que, seguramente, se aumentarán los criterios y se volverán más estrictos en cuánto a su obtención para velar por la protección a la biodiversidad en las áreas de abastecimiento.
Los ajustes en la cadena de suministro y es que esta nueva ley puede exigir una mayor transparencia a las empresas del sector en la trazabilidad de sus cadenas de suministro, apostando también por la realización de auditorías regulares en las cadenas de suministro.
En cuánto a la formulación de productos, ciertamente, las compañías especializadas en la producción y fabricación de ingredientes y activos cosméticos, quizás se vean obligados a emplear en sus fórmulas ingredientes con un menor impacto sobre el medio ambiente y esto puede derivar en un avance hacia la innovación para desarrollar nuevas sustancias que cumplan con los estándares que sigan con la línea de esta directiva.
Por otra parte, la normativa que entra en vigor después de ser publicada en el Diario Oficial de la Unión Europea, repercutirá en una mayor burocracia para las empresas. La industria podría enfrentar requisitos de documentación e informes más estrictos para asegurar el cumplimiento con los nuevos estándares ambientales. Además de las sanciones por incumplimiento que establecerá la Unión Europea a aquellos entes que no cumplan con la normativa y que puede afectar a su situación financiera. Su situación financiera también puede verse afectada por los costes que inicialmente puede conllevar el adaptarse a esta nueva normativa. Algunas compañías pueden verse obligadas a invertir en nuevas tecnologías, en la reformulación de productos o n cambios de proveedores.
La ley fue propuesta en junio de 2022 bajo el marco estratégico de la restauración de la biodiversidad en 2030, que forma parte del Green Deal, reconocido por la industria.