¿Qué es la servitización y cómo se esta aplicando en el sector textil y moda?

Servitizar los productos textiles y de moda, poner en marcha una estrategia de servitización en el entorno del producto, crear productos orientados a ser servicios, replantear el modelo de acceso a los productos y replantear como usamos los productos que nos visten, son algunos de los retos con los que actualmente el sector textil más innovador está trabajando.Concretamente, la servitización es una estrategia de la economía circular que busca alargar la vida útil de los productos mediante su uso, entendiendo el producto como un servicio, y también acompañado de la oferta de los productos con servicios vinculados, con esta visión de alargamiento de la vida útil de los productos. La servitización participa directamente en la innovación de nuevos modelos de negocio de las organizaciones, amplifica sus capacidades y procesos para crear valor mutuo a través de un cambio de paradigma, pasando de la venta de productos al uso de los productos. En el caso del sector textil-moda esto implica, por ejemplo, la posibilidad de alquilar las prendas de ropa en lugar de comprarlas.A través de la servitización, las empresas pueden optimizar el uso de los recursos y reducir el impacto ambiental de las producciones. En lugar de vender prendas de ropa que, después de cierto tiempo, se convierten en residuos, se alarga la vida útil de estas piezas a través de varias estrategias para reducir el número de prendas de ropa que se producen e incrementar su uso. Se trata de un fenómeno en pleno auge y crecimiento que mejora la eficiencia en cuando a empleo de recursos, en este caso textiles, participando en la disminución de la presión en la extracción de materia prima y proporcionando un efecto positivo para el medio y también para la sociedad. Por lo tanto, la gestión de los productos textiles entra con fuerza en esta nueva ideación e innovación relacionada con los nuevos modelos de negocio.La servitización introduce un cambio de paradigma sustancial dentro del sector textil y de la moda: pagar solo por la utilización de productos en vez de adquirir productos nuevos. Existen varias aproximaciones en esta manera de entender al cómo accedemos a los productos de moda. A nivel teórico, encontramos dos grandes tipologías: la servitización por sustitución y la servitización por adición. Además, también encontramos vinculadas a estas dos tipologías, varias orientaciones según si el foco se orienta al servicio asociado al producto, si el foco se orienta al uso del producto o si el foco se orienta a resolver las necesidades de los usuarios.A continuación explicamos estas aproximaciones a través de varios ejemplos actuales. Servitización por adición: o sea añadir servicios adicionales a un producto existente para crear una oferta de valor más completa y atractiva para los clientes, y que permita a través del servicio alargar la vida útil del producto. Aquí, el foco es el dar servicios vinculados al producto. Por ejemplo, una tienda de moda podría añadir servicios como la reparación, el mantenimiento, la customización, también incluiríamos servicios de recogida de las prendas de ropa que los usuarios ya no quieran (take-*back schemes), etc... En este tipo de estrategia podríamos poner varios ejemplos de marcas de moda que están trabajando bajo estos parámetros. Por ejemplo, la marca LEVIS ofrece un servicio de reparación y customización a través de sus programas Levi's Tailor Shop y Levi's Customization. La marca Nudie Jeans también ofrece un servicio de reparación en algunas tiendas de referencia en las principales ciudades donde está presente. Otro ejemplo es la marca Taylor Stitch, que es una marca de moda masculina que ofrece un servicio de reparación gratuito de por vida para todas sus piezas. Servitización por sustitución se refiere a transformar un producto en un servicio, o también se incluirían estrategias para cubrir las necesidades de los usuarios a través de servicios. Por lo tanto, aquí encontraríamos las estrategias de alquiler, o estrategias para compartir los productos, ya sean entre usuarios gestionados por una marca o una plataforma. Ejemplos de estas estrategias en el sector de la moda cada vez están más presentes, con la particularidad que la combinación de varias variables, como la suscripción, la reventa, el retorno de piezas usadas, la IA, etc... Vinculadas a la servitización están configurando nuevos modelos de negocio dentro del sector. Algunos ejemplos de alquiler de ropa los encontramos en las propias marcas, como podría ser la oferta de la marca SKFK a través de su plataforma Rentvolution, donde la propia marca pone en alquiler algunas de las piezas de la colección. Otro ejemplo es la empresa Mud Jeans que basa su modelo de negocio con el alquiler de texanos de larga duración, la diferencia con SKFK es que Mud Jeans tiene toda su oferta de texanos disponibles por el alquiler. Vinculado también a modelos de negocio basados en el uso, también están emergiendo plataformas que ofrecen, a través de servicios de suscripción en combinación con el alquiler, productos de marcas diversas. Ejemplos como Ecodicta, Rent the Runway o Me lo prestas ofrecen espacios virtuales que ponen contacte stocks, marcas o incluso usuarias para poder alquilar productos por un tiempo determinado, usarlos y después devolverlos. Un ejemplo más concreto, que ofrece un servicio doble es La más mona, que ofrece el alquiler de piezas de moda, pero también ofrece la posibilidad a sus clientas de alquilar la suyas propias piezas de su propio armario. Se observa, pues, que este tipo de servicios están evolucionando, pero también haciendo emerger el concepto de la colaboración, la comunidad y el compartir.Como reflexión final, podríamos mencionar los beneficios ambientales asociados a estos modelos de negocio que impulsarán o están impulsando estrategias de economía circular para alargar la vida de las prendas de ropa, ya sean las que ofrecen las propias marcas, o como también el propio armario de los consumidores/usuarios. La gestión de productos y su logística acontecen los puntos claves a abordar y trabajar en clave ambiental por los próximos años. La durabilidad de los productos y como están diseñados porque estos puedan cumplir estas funciones de multiplicidades de vidas, además de ser fácilmente reciclables, es también uno de los retos del sector que tendrá que responder con mejores calidades y propiedades físicas de los productos porque sean duraderos, pero también se tendrán que tener en cuenta las estrategias de durabilidad emocional vinculadas con las tendencias y los aspectos más estéticos y visuales de los productos de moda. La servitalización es, pues, una de las estrategias de la economía circular que incide en múltiplos variables, ya sean vinculadas a producto como vinculadas a nuevos modelos de negocio. Desde el Clúster Catalán de la Moda (Modacc) hemos realizado un estudio con el apoyo de la Agencia de Residuos de Cataluña, donde se identifican las principales estrategias y fórmulas que están emergiendo en el seno del sector, ya sea a nivel autonómico como internacional. También se ha trabajado al idear una metodología de creación de nuevas líneas de negocio vinculadas a la servitización para las empresas de moda que quieran explorar como podrían crear estas nuevas oportunidades. Actualmente se está trabajando en una Guía de recomendaciones y buenas prácticas para introducir estrategias de servitización en las empresas de moda, resultado del proyecto liderado por el Clúster.

¿Qué es la servitización y cómo se esta aplicando en el sector textil y moda?

Clara Mallart

Área de Sostenibilidad y Economia Circular en Modacc