No es la primera vez que Zara, la principal marca del grupo Inditex, busca hacerse un hueco dentro del lujo y la exclusividad. Tras el intento fallido de SRPLS (de las siglas en inglés del término surplus) en 2018, la primera colección de Marta Ortega antes de heredar el grupo, esta vez ha sido el turno de Atelier. Una colección premium compuesta por 6 prendas que quieren reivindicar la artesanía y el oficio de modisto, y que tiene un precio que oscila los 200 euros de media.
En concreto, se trata de 6 vestidos con precios que van desde el modelo más económico, 199 euros, pasando por 3 diseños intermedios, de 249 euros, hasta llegar a los de rango más elevado: 299 euros. La colección se encuentra disponible en la página web y en tiendas muy seleccionadas.
A pesar que existen hasta 4 colecciones más en el corazón de la firma española: Origin, Studio, SRPLS y la propia campaña; 'Atelier' es toda una declaración de intenciones, pero lo que, también, es el movimiento más arriesgado: marcar distancias con el fast-fashion (poca exclusividad, mucha cantidad y una enorme diligencia para satisfacer a un consumidor impaciente). Este es el segundo abordaje de Zara Atelier en el lujo. El primero vio la luz a finales de 2021 con otra colección cápsula de temporada: 6 abrigos a un precio fuera de lo habitual para Zara, entre unos 300 - 400 euros según el modelo.
Del 'fast fashion' al 'slow fashion':
Inditex no ha sido la única firma de moda que ha apostado por una filosofía más cercana al slow fashion. El grupo sueco H&M, su principal competidor, en la época de los 2000 realizó colaboraciones con marcas más aspiracionales. Una de ellas fue con la casa Chanel, ofreciendo prendas de alta costura a un precio asequible. ¿El resultado? Las piezas se agotaron en pocas horas. Esto ha supuesto un punto de inflexión para el sector del lujo y key players como el grupo LVMH: "El sector de lujo es el único en el que es posible hacer márgenes de lujo", apuntaba Bernald Arnault, su CEO. Recientemente, algunas de sus marcas como Gucci, Prada o Dior, han realizado alianzas con gigantes de la moda deportiva como pueden ser Adidas o Nike.
Este acercamiento de la industria del 'fast fashion' al lujo es simplemente, según el experto en moda Pau Almar, una estrategia comercial para incrementar las ventas: conseguir vender un poco más caro, sin ganar dinero, para reposicionar la marca y situarla en un escalafón por encima (upselling).
Sin embargo, existen otras razones que van mucho más allá de los propios beneficios y que caracterizan al sector del lujo: usar materiales más nobles que los habituales, apostar por productos de atemporales o realizar tiradas cortas. En definitiva, apostar por modelos de producción y uso de moda más sostenible y respetuosa con el medioambiente: pasar de best sellers a long sellers.