La industria capilar confía en una nueva solución contra la alopecia: la vacuna. La alopecia y la pérdida del cabello se ha establecido como una de las principales preocupaciones para los hombres en cuánto a su imagen personal. Es por ello, que solucionar y remediar la caída del cabello se ha convertido en una de las metas de la industria del cuidado capilar.
Mientras, los suplementos alimenticios, soluciones no invasivas y los trasplantes capilares se turnan como la única alternativa ahora posible para poner fin a la calvicie. En 2021, casi 3,4 millones de personas a nivel mundial se realizaron algún tipo de trasplante capilar. Según indican las últimas estadísticas de Global Market Insights, el tamaño del mercado de los trasplantes capilares tiene un tamaño de entre unos 5.000 y 8.000 millones de dólares, pero se estima un crecimiento aún mayor: podría llegar a los 37.000 millones de dólares en 2032. Turquía es el país predilecto para realizarse este tipo de cirugías, y el 10% de los pacientes son españoles.
El pasado mes, numerosos medios de comunicación se hacían eco del avance de una vacuna como tratamiento contra la calvicie y la alopecia. Maksim Pilkus y demás investigadores dirigidos por la Universidad de California en Irvine, publicaron en 2022 un estudio que aseguraba que el mecanismo preciso por el cual las células localizadas en la parte inferior de cada folículo piloso promovían un nuevo crecimiento estaba asociado a la existencia de una molécula. Esta molécula llamada SCUBE3 se encarga de potenciar el crecimiento del cabello y puede convertirse en un tratamiento terapéutico para la alopecia androgenética. El autor del estudio declara que las mismas células de la papila dérmica (la parte inferior del folículo piloso) eran capaces de enviar señales que desencadenaran el crecimiento de nuevo del cabello: "la molécula SCUBE3 es el mensajero utilizado para 'decir' que las células de la papila dérmica producen de forma natural, es el mensajero utilizado para 'decir' a las células madre del cabello vecinas que comiencen a dividirse, lo que presagia el inicio del crecimiento de cabello nuevo".
Pero, ¿cómo se administraría esta molécula? El investigador que lidera este estudio cree que podría inyectarse directamente en el cuero cabelludo o quizás como una vacuna que modifique el ARN. Todo esto, se establecería posteriormente de estudiar la viabilidad y la seguridad de la molécula como fármaco, algo que ya está realizando Amplifica, que ha iniciado los ensayos clínicos, tal y como avanza la revista especializada New Scientist.
Por el momento, existen aún tratamientos personalizados y no invasivos para amenizar la espera a esta tan deseada cura para la calvicie que no es el trasplante. Por ejemplo, las infiltraciones de plasma rico en plaquetas (PRP), el láser de baja potencia, el tratamiento de exosomas y microinyecciones de minoxidil. Otro que ha ganado popularidad en los últimos meses es la mesoterapia capilar, que se trata de un procedimiento médico en el que se inyectan pequeñas dosis de sustancias beneficiosas directamente en el cuero cabelludo.