Mitos cosméticos a debate (IV): Los solares ¡Protegen!

Science media manager de empresas de cosmética
03 de Mayo de 2023
Protectores solares

Muchas vueltas le he dado a este artículo antes de sentarme a escribirlo. Y es que, con la llegada de buen tiempo, no solo el calor hace acto de presencia, sino que aparecen los mismos mensajes alarmistas de cada año. Y los indiscutibles protagonistas son ¡los filtros solares!

Estoy casi al 100% segura de que conoces la conexión de los filtros con palabras como disruptores endocrino o carcinógenos. La verdad es que, con estos mensajes, parece que la industria cosmética se haya propuesto intoxicar a las personas. ¿No crees? Pero yo me pregunto, ¿cuánto de cierto hay detrás de toda esta información? Sigue leyendo, que lo analizamos.

Ante todo, es importante destacar que los filtros que están listados en el anexo VI del reglamento 1223/2009, han sido examinados toxicológicamente y sometidos a diferentes pruebas para comprobar que su uso es seguro. Por su complejidad, están en el punto de mira, y siempre que aparecen nuevas “pruebas” o anomalías se revisan. Y en caso de ser necesario, se toman medidas. Por ejemplo, el 4-MBC. Tras los hallazgos que demostraban su potencial estrogénico a su concentración máxima permitida (4%), está siendo revisado para reevaluar su concentración de uso. ¿Se reducirá? ¿Se prohibirá? Estaremos atentos.

Llegados a este punto, habrá quien pueda ponerse las manos a la cabeza. Pero, creo que es importante darse cuenta de que la ciencia avanza y que no es estática. Y que, en de temas de salud, las autoridades competentes no se andan jugando a la ruleta rusa. La verdad absoluta no existe y creo no debe menospreciarse el trabajo que hacen y mucho menos, tratándose de ingredientes tan necesarios para prevenir enfermedades devastadoras como el cáncer.  

¿Qué haríamos en verano sin los solares? La protección es importante en los 360º y para ello las pruebas siempre deben ser fehacientes.

Mira, si hay algo que siempre defenderé es que la industria cosmética no pretende intoxicar a nadie (¡ay!, si me pusiera hablar de los sin tóxicos…). La máxima premisa es la seguridad de las personas consumidoras, y creo que pretender dar a entender lo contrario es jugar sucio.

Es importante siempre contextualizar la información y no lanzar mensajes alarmistas sin pruebas reales que los respalden. Aunque la realidad, muchas veces dista de esta premisa. ¿Qué piensas cuando lees este titular?

“Estos son los ingredientes que tienes que evitar en los protectores solares.Concretamente, el homosalate y el octocrylene son dos componentes a evitar por la falta de evidencia científica”.

Yo lo primero que pienso es que debo evitarlos, porque no han sido suficientemente estudiados (cuando eso no es cierto).

Pero unos párrafos más abajo dicen: “las pruebas científicas no son concluyentes, algunos estudios sugieren que el homosalate puede interferir en el funcionamiento normal del sistema endocrino".

Vale, entonces, realmente no hay nada concluyente. ¿Y si lo dijeran desde otra perspectiva? Sin generar miedo de algo que no ha sido demostrado, y que puede o no ser verdad.

Espera, que este otro ejemplo me vendrá perfecto. Hace unos años se tachó al octocrileno de ser fotosensibilizante. Tras estudiar los casos, se observó que dicha reacción era debida al uso tópico de geles antiinflamatorios. Así que, no era fotosensibilizante. Y por eso insisto en que contextualizar la información es importante.

En un artículo publicado en 2019, se concluía que algunos filtros eran absorbidos y llegaban al torrente sanguíneo.

Si nos quedamos solo con esta premisa, yo sería la primera en abandonar el barco, pero una vez más: el contexto es importante. Dicho artículo abrió la puerta a nuevos estudios para evaluar la seguridad de los filtros. Pero (y lo dice el propio artículo), los resultados no son extrapolables al uso real. Veamos las condiciones del estudio:

Los sujetos se aplicaron los protectores solares 4 veces al día, con aplicaciones de 2mg/cm2, en el 75% del cuerpo. Además, mientras duró el estudio, los sujetos no abandonaron la clínica en ningún momento.

Y sí, hubo absorción. Pero ¿por qué no podemos extrapolar estos resultados?

  1. Porque cuando permanecemos en interiores, no nos aplicamos crema solar en el 75% del cuerpo.
  2. Si somos realistas, la cantidad de 2mg/cm2 es muy superior a la que nos aplicamos.
  3. Estando en el exterior, como en la playa, sí nos aplicamos el producto en el 75% del cuerpo. Pero teniendo en cuenta la anterior premisa y que, el sol, el sudor y los baños, reducen la cantidad de producto que permanece en la piel, la concentración absorbida del estudio no es representativa.

¿Puede que a la larga tenga razón? Claro, pero es importante que se demuestre en las condiciones adecuadas. ¿No crees?

Además, otro ejemplo, que un ingrediente sea irritante al 50%, no quiere decir que al 2% también lo sea. ¡Por eso contextualizar siempre es importante!

Así que, resumidamente, no creo que deban ocultarse los hechos si hay sospechas de algo, porque informar siempre debe ser importante. Pero también lo es hacerlo sin sesgar la información. Porque como siempre digo, el consumidor ha de ser libre para decidir, con conocimiento de causa, qué cosmético elige y porqué. Sin manipulaciones y sin miedos.