¿Conoces la capacidad que tienen los olores para crear recuerdos?

04 de Octubre de 2022
Imagen cedida por Sandir. El marketing olfativo, cada vez más relevante

Si te paras a pensar, seguro que hay personas, lugares y momentos a los que asocias un determinado olor y al percibirlo automáticamente te vienen al pensamiento.

Esa es la capacidad que tienen los olores para crear recuerdos en nuestra mente. Está demostrado que los humanos tenemos una gran capacidad de recordar aquello que olemos y lo que nos evoca. Además, las fragancias que nos gustan ayudan a crear buenos recuerdos, tienen efectos positivos en nuestras percepciones generando conmemoraciones y emociones agradables hacia aquello a lo que asociamos un determinado aroma.

Si aplicamos esto a las empresas vemos la capacidad de generar recuerdo de marca a través de las fragancias. Por ejemplo, aquellas tiendas que paseas por la calle e identificas gracias al olor que desprenden o el olor en la ropa de tu detergente favorito o el olor a café recién hecho.

En los últimos años, los estudios de neuromarketing sobre la capacidad de los olores para generar recuerdo de marca han tomado peso y ya son muchas las empresas que aplican el marketing olfativo en sus negocios.

En un entorno tan cambiante y competitivo es necesario aplicar estrategias de marketing sensorial para que tu consumidor te identifique como algo más que una simple marca entre tantas, se trata de crear experiencias y conectar con las sensaciones de tu consumidor. Se ha probado como el aplicar el marketing olfativo en los negocios consigue grandes beneficios para estos, traducidos en el aumento de ventas a través de generar emociones positivas, mejorar la percepción de la marca y generar recuerdo de marca situando tu negocio en el top of mind.

Asimismo, como bien se sabe el recuerdo de marca está influenciado por la experiencia de compra que percibe el consumidor. Por lo tanto, hay que cuidar el mínimo detalle posible. Si lo asociamos a un producto es clave diseñarlo a medida, para hacer que los clientes lo recuerden siempre, en el momento de aplicar un cosmético lo primero que hacemos es olerlo y después vivimos la experiencia y sobretodo la en el momento de aplicarlo sobre nuestra piel.

¿Dejarías de aplicarte una crema súper TOP si te decepcionara su olor? Lo pregunto porque es más común de lo que parece y... ¡Porque sucede!

Imagínate: un cosmético de alta gama que viene en un envase muy cuidado, con un diseño minimalista, elegante y sofisticado y que al aplicártelo su fragancia te dejara un olor desagradable, a la base cosmética, a bayeta húmeda,... ¿Te gustaría? Probablemente sentirías que algo falla, que falta coherencia, que no concuerda con lo que esperabas del producto. Y es que, escoger el olor que acompaña a un cosmético -y más si es de alta gama- es parte de su esencia y debe ir en consonancia.

La fragancia debe hablar del producto. No es algo que deba ser aleatorio, evaluar la fragancia en el producto y en sus estabilidades nos dará información de cómo evolucionará la nota. Y tiene que argumentarse con el resto del producto para que sintamos que es un producto TOP. Si el producto tiene una fragancia agradable tendremos más deseo de aplicárnosla y de utilizarla para percibir la sensación hedónica que nos evoca.

Para adaptarse al mercado actual es necesario aplicar técnicas de marketing sensorial para crear una buena experiencia con tu producto o servicio.