(My) Knowledge is power. Esta es una de las tendencias que predice Mintel, la agencia de datos de mercado para el próximo 2025. Los consumidores ahora toman decisiones más inteligentes, combinando conocimientos, herramientas y tecnologías para lograr soluciones personalizadas que se ajusten mejor a sus necesidades, expectativas y deseos. Según un informe de Mintel, esta tendencia comenzó en 2009, cuando los consumidores tomaron conciencia de su poder de elección e interés en la eficacia y la ciencia detrás de los productos. Para 2018, los consumidores ya eran conscientes de su influencia sobre las marcas y demandaban soluciones a su medida. En los últimos años, la inteligencia artificial y las redes sociales han ganado relevancia en su proceso de decisión y les han ayudado más específicamente a conocer los efectos de cada ingrediente de sus rutinas cosméticas.
Mintel predice y proyecta que en 2025, el consumidor seguirá adoptando prácticas de belleza inteligentes, utilizando tanto su conocimiento previo como las herramientas tecnológicas. Las rutinas de belleza se simplificarán en busca de eficacia y productos probados, ganando popularidad los artículos de bronceado y el “skin slugging” (aplicación de vaselina para retener la hidratación). La seguridad de los ingredientes y factores ambientales como la calidad del agua y del aire serán temas de creciente interés. Por ello, los consumidores mostrarán interés por los productos que contengan adaptógenos, ginseng o astrágalo.
Por ejemplo, en China, donde la eficacia de los ingredientes es clave, las marcas se diferenciarán con productos personalizados, alineados con los valores del consumidor. Así, la belleza se integrará más con la salud, y se lanzarán productos que prioricen el bienestar.
Desde Mintel, con una visión más a largo plazo, señalan que para 2030 se prevé una revolución impulsada por la tecnología y la personalización. La Generación Alpha, que para entonces ya serán adultos y que han crecido en una sociedad familiarizada con la IA, transformará la industria con realidad aumentada y asistentes virtuales. La inteligencia artificial anticipará las necesidades de cuidado de la piel, ofreciendo soluciones efectivas para cada individuo en una sociedad en proceso de envejecimiento.